TODA HISTORIA ES UNA SUCESIÓN DE HUELLAS, SIMEON MEDRANO, NATURAL DE LIMA...

gran luchador de coraje, y cocinero de nacimiento, porque la vida así lo quiso; fue el forjador y que dio vida a El Rinconcito de mi Tierra, en una travesía a emigrar hacia Santiago de Chile, para pensar en abrir un restaurante solo de cocina peruana, se consideraba un reto.

La creación de El Rinconcito se constituyo entonces en el más extraordinario reto: Mostrarle y enseñarle a los chilenos y compatriotas peruanos, una cocina, cuya filosofía era la de recuperar, revalorar, y preservar las expresiones culinarias de las regiones del Perú.

Significó también llevar por primera vez las agallas de conquista a la cocina, dotándola de vida, calor y contenido. Es decir, queriendo largamente ofrecernos y ofrecerle a los santiaguinos, una cocina honesta, trascendente, con una historia hasta ese momento no contada ni asumida, y de inéditos y mágicos sabores, y que hoy asombra y seduce al mundo.